miércoles, 11 de junio de 2008

Curiosidades de los siglos XV - XVI

Al visitar el Palacio de Versalles, en Paris, observamos que el suntuoso palacio no tiene baños.

En la Edad Media no existían: cepillos de dientes, perfumes, desodorantes, y mucho menos papel higiénico. Las heces y orinas humanas eran tiradas por la ventana del palacio.
En un día de fiesta, la cocina del palacio era capaz de preparar un banquete para 1500 personas sin la más mínima higiene.
Vemos en las películas a la gente siendo abanicada. La explicación no está en el calor, sino en el mal olor que exhalaban las personas por debajo de los vestidos (eran hechos a propósito para contener los olores de las partes íntimas, porque no se lavaban).

Tampoco había costumbre de bañarse por la falta de calor en las habitaciones y de agua corriente. Así el mal olor era disipado por el abanico.

Pero solo los nobles tenían lacayos que hacían esta labor. Además de disipar el aire también espantaban insectos que se acumulaban a su alrededor.
Quien ha estado en Versalles se ha maravillado con sus jardines, enormes y hermosos, que en la época eran mas usados que contemplados ya que se usaban como retretes en las fiestas promovidas por la realeza, ya que no tenían baños y se reunía una gran cantidad de personas.

En la Edad Media la mayoría de las bodas se celebraba en el mes de junio, al comienzo del verano.
La razón era sencilla: el primer baño del año era tomado en mayo, así, en junio, el olor de las personas aun era tolerable. Asimismo, como algunos olores ya empezaban a ser molestos, las novias llevaban ramos de flores, al lado de su cuerpo en los carruajes para disfrazar el mal olor. Así nace mayo como mes de las novias y la tradición del ramo de novia.

Los baños eran tomados en una bañera enorme llena de agua caliente.
El padre de la familia era el primero en tomarlo, luego los otros hombres de la casa por orden de edad y después las mujeres, también en orden de edad. Al final los niños, y los bebes los últimos.

Cuando se llegaba a ellos ya se podía perder un bebe dentro del agua de lo sucia que podía estar.

Los tejados de las casas no tenían bajo tejado y en las vigas de madera se criaban animales, gatos perros, ratas y otros bichos. Cuando llovía las goteras forzaban a los animales a bajar. De esto nació la expresión llueven perros y gatos típica anglosajona.

Los más ricos tenían platos de estaño. Ciertos alimentos oxidaban el material y hacía que mucha gente muriese envenenada lo que, unido a la falta de higiene de la época se hacía muy frecuente. Los tomates, que eran ácidos y provocaban este efecto fueron considerados tóxicos durante mucho tiempo. En los vasos ocurría lo mismo donde, al contacto con whisky o cerveza hacia que la gente entrara en un estado narcoléptico
producido tanto por la bebida como por el estaño.

Quien pasase por la calle y viese a alguien en este estado podía pensar que estaba muerto y ya preparaban el entierro. El cuerpo era colocado sobre la mesa de la cocina durante algunos días y pasaba con la familia mientras ellos comían y bebían esperando que volviese en si o no.

De esta acción surgió el velatorio que hoy se hace junto al cadáver.

Los lugares para enterrar a los muertos eran pequeños y no había siempre suficiente sitio para todos. Los ataúdes eran abiertos y retirados los huesos para meter otro cadáver. Los huesos eran retirados a un osario. A veces al abrir los ataúdes, se percibía que el enterrado había arañado la tierra. Había sido enterrado vivo.

En esta época surgió la idea de, al cerrar el ataúd, agarrar a la muñeca del difunto un hilo pasarlo por un agujero del ataúd y atarlo a una campanilla sobre la tierra. Si el individuo estaba vivo solo tenia que tirar del hilo y sonaría la campanilla y seria desenterrado ya que una persona estaba al lado del ataúd durante unos días. De esta acción surge la expresión Salvados por la campana que usamos hoy día.


Gracias a Maite/Liriel por enviarme este e-mail tan curioso vía la lista de correo de Chorradillas ^___^

2 comentarios:

Goblinoide dijo...

Argh, qué asco... ^^U con lo bonito que quedaba todo con sus flores y sus vestidos de 200 kg y sus abanicos... ^^U
Vamos, lo de bañar el último al bebé me parece demencial ^^U y por qué narices no cambiaban el agua, si sólo tenían que ir al río???

La enfermedad esa que dices creo recordar que se llama Catalepsia, una vez leí un libro que iba sobre un niño de un pueblo de esta época, que se quedaba con apariencia de muerto y mientras lo estaban velando, se recobraba de la catalepsia y todos le repudiaban pensando que era un vampiro, haciendo incluso que el pobre (de unos 9 años) se lo creyese él mismo y tuviese que irse a vivir a las montañas, volviendo a hurtadillas para robar comida y para "morder" a otra niña de la que estaba enamorado... en fin, un culebrón ^^U

Ghanima Atreides dijo...

Hmmm... Creo recordar que por aquel entonces habían dejado de conocerse los beneficiosos efectos del baño (que puede ser que recuerde mal lo que me explicaron en el cole, claro). Y también recuerdo que sólo se bañaban bajo prescripción médica (también me hizo gracia cuando me contaron que al poco de traerlo de las américas, el azúcar sólo lo tomaban aquellos que se lo recetaba el médico...).
Tampoco había ríos tan a mano en todas partes...
De todas formas, esto solo es un copypaste de un mail que me llegó, tampoco se el porqué de las cosas que en él pone, aunque lo doy por cierto ya que concuerda con otras cosas que había leído por ahí (¡Y en 'Erase una vez el hombre'!).

Hmm... la catalepsia creo que no se produce por ninguna intoxicación. De todas formas, con semejante higiene, las intoxicaciones estarían a la orden del día, y cualquier coma leve podía tener el mismo efecto de ser enterrado vivo (los comas profundos (entiéndase por de larga duración) no los cuento, porque al no ingerir alimento durante la duración del mismo, el efecto vendría a ser el mismo que si lo hubieran enterrado muerto) y que no se dieran cuenta.

Pero sí, una de las explicaciones que hay por ahí sobre el surgimiento de la leyenda del vampiro dice que se debe a que periódicamente aparecía gente aquejada de catalepsia que misteriosamente 'revivía', igual que dicen que la leyenda del hombre lobo surgió debido a que también de vez en cuando surgía gente con hirsutismo (vello por todo el cuerpo, excepto plantas de los pies y manos, creo, más largo de lo normal, muy similar al pelaje de algunos mamíferos).

Enfin...
Que todos los días acabamos aprendiendo algo más...

Besos preciosa!!